"Second to None", el segundo álbum de Arizona Baby, ha sido uno de los discos del año en la escena independiente nacional.El trío Pucelano volverá hoy a las 22:30 a la sala LeClub por segunda vez en pocos meses, acompañado por el cantautor pontevedrés Graham Summer.Mañara actuaran juntos de nuevo en la sala Manchita Cosa, ferrol.
El grupo vallisoletano Arizona Baby, liderado por Javi Arizona, actuará hoy a las 22.30 horas en la sala LeClub, con Graham Summer de telonero. Su segundo disco, Second to None, ha provocado revuelo en la escena independiente nacional.–¿Cómo llevan la polvareda que están levantando?
–Trabajamos día a día y no nos planteamos objetivos a largo plazo, aunque estamos muy agradecidos y sorprendidos por los logros que hemos alcanzado estos meses.
–Pero eran conscientes de que tenían un gran disco entre manos.
–Eso sí, en el aspecto artístico sí que teníamos seguridad. Estábamos muy seguros de Second to None, y sabíamos que si conseguíamos difusión, que es lo que nos faltaba, daríamos que hablar.
–Se les compara de forma recurrente con el grupo estadounidense Violent Femmes.
–Lo entiendo, pero no estoy de acuerdo. Supongo que se dirá porque compartimos formato y actitud; ambas bandas hacemos música acústica cañera, sin ñoñerías. Pero, pese a que me gustan, no veo más relación.
–Su sonido tiene más relación con las presupuestos del folk siniestro de Woven Hand.
–Woven Hand son muy buenos, como Howlin´Rain, y Fleet Foxes. Sí que tenemos semejanzas con estas bandas, que aman los sonidos americanos más oscuros, pero no nos inspiramos en ellos, aunque compartimos algunas influencias. Nosotros venimos del stoner, la psicodelia, la faceta acústica del grunge, Johnny Cash y power trios de los 60 y 70, como Cream y Grand Funk Railroad.
–¿Cómo está asumiendo el público español una música tan americana como la que practican Arizona Baby?
–Se recibe con sorpresa, en el buen sentido. Hay hambre de este tipo de sonido, y notamos que la gente aprecia la música honesta, sin artificios, y que ven nuestra propuesta auténtica y sensible.
–Van a telonear a Chris Isaak en su gira española.
–Soy un fanático absoluto (risas). Me atrapó desde que oí su canción Wicked Game en la película Corazón salvaje. Por su influencia empecé a tocar la guitarra, y tomo muchos apuntes de su música para mis composiciones. Obviamente, me hace mucha ilusión tocar con uno de mis maestros.
–Ustedes cuidan mucho su imagen, tanto en lo personal como en el diseño de sus discos.
–Nuestra imagen forma parte de un todo, como una manifestación extrema de nuestra vida y nosotros mismos. Si nos ponemos pedantes, Arizona Baby es nuestro reflejo en los espejos del Callejón del Gato de Luces de Bohemia (risas). Proyectamos una estética que potencia el entendimiento de nuestra música, y en escena lucimos nuestras mejores galas por respeto al público.
(Luis P. Ferreiro, laopinioncoruna.es)