Los diez mejores discos para días de hoy por Javier Vielba de Arizona Baby
Ojalá me hubiesen pedido cien discos y no diez. Fuera de la lista se quedan Love, Hawkwind, Kyuss, Black Sabbath, Meat Puppets, Velvet Underground, Screaming Trees, Blue Oyster Cult, Chris Isaak, Mad Season, Hank Williams, Sly and the Family Stone y tantos otros grandes artistas de variado pelaje que han puesto banda sonora a mi vida y, sin los cuales, hoy en día no me dedicaría a hacer canciones.
Sin ánimo de ser exhaustivo ni de cubrir todos los campos que me interesan, he decidido no pensar mucho y enumerar unos cuantos discos –SIN orden de prioridad- que, cada vez que suenan, siempre escucho hasta el final.
Masters of Reality – ‘Sunrise on the Sufferbus’ (1992)
Un maravilloso disco de blues fumeta y pantanoso con letras sugerentes y enigmáticas. Por muchas vueltas que de el mundo, jamás envejecerá.
Guns ‘N’ Roses – ‘Appetite for Destruction’ (1987)
No sé si es muy cool reivindicar un disco como este en los tiempos que corren, pero tampoco es que me preocupe demasiado. Gracias a estos tíos decidí que quería aprender a tocar la guitarra y montar una banda de rock and roll. Por otro lado, excepto ‘Think About You’ y ‘Anything Goes’, todas las canciones suenan igual de arrolladoras que el primer día que las escuché.
Johnny Cash – ‘At Folsom Prison’ (1968)
Mi disco en directo favorito de todos los tiempos. Lo siento por UFO y Thin Lizzy, cuyos discos en directo son una pasada. Johnny, con Carl Perkins a la guitarra, se lo come crudo en Folsom.
The Doors – ‘Strange Days’ (1967)
Con este disco me di cuenta de que había que conocer las reglas para poder romperlas. Esto me lo corroborarían años más tarde Miles Davis, Can, John Coltrane y Frank Zappa, entre otros. The Doors… ¡qué imaginación!
Grinderman – ‘Grinderman’ (2007)
O cómo la actitud punk y los sonidos deliberadamente lo-fi pueden no estar reñidos con la elaboración musical y la finura compositiva. Me quito el sombrero ante Nick Cave.
Monster Magnet – ‘Dopes to Infinity’ (1995)
Mezcla Black Sabbath con Stooges y Hawkwind, drógate a lo bestia, practica el sexo ritual más extremo y planea una guerra nuclear a escala mundial. Ni con esas conseguirás parir un disco tan peligroso como este.
The Stooges – ‘Fun House’ (1970)
Me remito a lo dicho con respecto a The Doors… y es que hay un tipo de bandas que yo siempre relaciono: The Doors en los 60, Stooges en los 70, The Gun Club en los 80, Screaming Trees en los 90… Hay algo especial en todos estos grupos y su imaginario. Volviendo a The Stooges, si alguna vez el punk rock y el free jazz fueron uno, es en ‘Fun House’. Menos mal que aún no sabían tocar…
T-Rex – ‘Electric Warrior’ (1971)
Marc Bolan demostró que no hacía falta ser The Beatles o The Beach Boys para hacer música esplendorosa, divertida, atemporal… y encima vendía discos como churros. Bolan es una de las estrellas definitivas del rock and roll.
Grand Funk Railroad – ‘Grand Funk’ (1969)
Este disco es brutal. Totalmente descarnado, crudo y con unas melodías irresistibles. Te engancha desde la primera escucha y te hace preguntarte por qué no hay chavales hoy en día formando power-trios salvajes y desbocados. Maestría instrumental y un 0% de complejos. Siempre admiraré a Mark Farner, Mel Schacher y Don Brewer.
Canned Heat – ‘Future Blues’ (1970)
Lo prometido en el título se convierte en realidad en cuanto pinchas el disco. Sin duda consiguieron predecir cómo sonaría el blues en el futuro. Especial mención para Alan “Búho Ciego” Wilson en temazos como ‘My Time Ain’t Long’, ‘Skat’ o ‘London Blues’.
(lasgafasdemike.com)